Cogemos el tren pronto en Brujas con destino a Gante. Esta ciudad tiene un casco antiguo tan bonito como el de Brujas, pero no es tan conocido.
La estación esta un poco lejos, así que cogemos un tranvía para acercarnos al centro. Llegamos hasta una plaza donde podemos ver la Torre del Campanario que junto a la Catedral de San Bavón y la Iglesia de San Nicolás forman el triangulo de las tres torres de Gante.
Cuando estamos paseando tranquilamente, se nos acerca un hombre y nos pregunta si somos españoles...y este como lo sabe?...Es un señor muy majo, que nos empieza a contar que el había estado varias veces por España y bastante en Euskadi. Conocía a un montón de gente, nos estuvo contando anécdotas y se ofreció a hacernos de guía por la ciudad y explicarnos cosas.
Nos enseño lo que antiguamente eran los mercados de carne y de pescado. Cada uno a un lado del río. El mercado de carne lo había restaurado y era un restaurante en el que vendían productos locales. Como curiosidad del techo colgaban jamones curándose.
Luego nos dijo que se tenia que ir a comer a casa, que le estaba esperando la mujer, pero nos dijo más cosas que podíamos ver. Y discretamente nos pidió si queríamos darle algo para un café o así. Vamos que al final el guía nos costo, pero mereció la pena.
Nos contó que parte de la ciudad estaba tomada por el ejercito, ya que se iba a celebrar una reunión de los ministros de defensa de la Unión Europea. Si que nos habíamos fijado que había más policía, y no sabíamos porque. Además coincidiendo con esta reunión estaba programada una manifestación por la paz. Lástima que era tarde y ya estaríamos camino de París.
Picamos algo barato, y volvimos hacía la estación, esta vez paseando, para poder pasar por un parque enorme CitadellPark. En el se encuentra un museo de arte moderno.
Vamos a la estación a esperar al tren que nos lleve hasta Bruselas. Nuestro tren hacía París sale desde allí. Tenemos un mapa de Bruselas, y nos damos cuenta de que tenemos una hora de espera en Bruselas, y pensamos que igual podemos aprovecharla para hacer una parada rápida y visitar lo más típico.
En vez de ir directamente a la estación desde donde salía nuestro tren. Cogemos un tren que nos deja en la estación Central, nos bajamos y vamos a ver la Catedral, de ahí bajamos a ver la plaza grande de la ciudad, donde se encuentra el ayuntamiento. Tenemos la mala suerte de que estaban montando un escenario enorme y nos jorobo un poco las vistas.
Seguimos a ver el Manneken pis, es una estatua de un niño haciendo pis, es una estatua más pequeña de lo que habíamos imaginado, eso si, íbamos avisados de eso, pero aún así sorprende. Y por lo menos estaba ahí, no se había ido a la Expo con la sirenita...
Tenemos hambre ¿que podemos comer? Otro gofre!! Que buenos que están!! Y mientras nos comemos el gofre ya vamos camino de la estación desde la que cogeremos el tren con destino a París.
En París, ya tenemos el hostal buscado, está cerca de la estación. Bueno no exactamente al lado de la estación donde llevamos pero hay dos estaciones muy cerca una de la otra. Llegamos y es tarde ya, nos vamos derechos al hotel.
El tío de recepción tiene una pinta muy rara y es bastante seco, pero bueno tenemos un sitio donde dormir y estamos molidos. Mañana tenemos todo el día para recorrer Paris.
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